Toda una tradición, que cada 28 de octubre la iglesia católica dedica una jornada especial a San Judas Tadeo, uno de los doce apóstoles de Jesús y símbolo universal de la esperanza en momentos de dificultad, en esta ocasión fue venerado por la familia: Aguirre Cruz, quienes durante 15 años han dedicado su devoción y tradición a Él por tantos y tantos milagros que les ha concedido, el Santo Rosario se lleva a cabo en su propio negocio, Grúas “Aguirre”, ubicado por el antiguo camino a Contreras.
San Judas Tadeo, está asociado con las causas imposibles, ha sido venerado por siglos por los creyentes que buscan alivio espiritual, consuelo y ayuda de Dios en las pruebas más duras que se les presentan.
Aunque su celebración tiene un arraigo especial en México, donde el Templo de San Hipólito y San Casiano congrega cada año a miles de fieles devotos, su culto se extiende por toda América Latina, Europa y EU. La fe en San Judas Tadeo trasciende culturas y generaciones, convirtiéndose en un lazo espiritual entre quienes buscan esperanza en medio de la adversidad.
Una de las oraciones de San Judas Tadeo es: “Apóstol gloriosísimo de Nuestro Señor Jesucristo, aclamado por los fieles con el dulce título de ABOGADO DE LOS CASOS DESESPERADOS, hazme sentir tu poderosa intercesión aliviando la gravísima necesidad en que me encuentro. Por el estrecho parentesco que te hace primo hermano de Nuestro Señor Jesucristo, por la privaciones y fatigas que por El sufriste, por el heroico martirio que aceptaste gustoso por su amor, por la promesa que el divino Salvador hizo a Santa Brígida de consolar a los fieles que acudiesen a tu poderosa intercesión, obtenme del Dios de las misericordias y de su Madre Santísima la gracia que con ilimitada confianza te pido a Ti, Padre mío bondadosímo, seguro que me la obtendrás siempre que convenga a la gloria de Dios y bien de mi alma. Así sea.”
Más que una tradición su devoción representa la certeza de que incluso en las circunstancias más difíciles, la Fe puede abrir caminos donde parece no haber salida.
Mediante este rosario de Grúas “Aguirre”, participó la Danza del “Divino Niño”, de origen duranguense, y en memoria de Jorge Castro Rodríguez, quienes realizan esta tradición que va de generación en generación desde hace ya 12 años.
