En México la obesidad y sobrepeso son una epidemia, no se han combatido efectivamente estos problemas de salud; gravar más a refrescos y bebidas azucaradas definitivamente no es la solución, solo se advierte un ánimo recaudatorio del gobierno federal que está hambriento de dinero, señaló en rueda de prensa la analista política y periodista Beatriz Pagés Llergo Rebollar, asegurando que se usa la salud como pretexto para incrementar impuestos.
Invitada por Coparmex Durango, la destacada periodista, politóloga y directora desde 1987 de la revista Siempre, compartió ante reporteros sus puntos de vista sobre algunos temas del acontecer nacional. Hizo breve referencia al Paquete Económico, donde el incremento a refrescos y algunas otras bebidas despertó inquietud social.
Desde sus 40 años de experiencia en el ámbito periodístico, Pagés Llergo reconoció que sexenio tras sexenio se utiliza el pretexto del bienestar de los mexicanos para incrementarle el gravamen a éstos productos.
“No lo digo yo, están como referencia las estadísticas de organismos internacionales que sitúan a México como el país más consumidor de refrescos a nivel mundial, lo que trae como consecuencia que su población padezca los estragos de la obesidad y sobrepeso”, destacó.
Y es que aumentarle el precio a gaseosas y bebidas azucaradas no es la solución, hace falta educación y cultura desde las escuelas, para hacerles ver a padres de familia y estudiantes sobre el daño que hace consumir dichos bebibles.
Con ésta actitud recaudatoría el gobierno federal deja al descubierto su hambre de dinero, la salud es solo el pretexto para cobrar más impuestos en medio de una grave crisis de sanitaria por el consumo de alimentos chatarra que tanto le cuesta a los ciudadanos y al sistema de salud pública.
Gobierno Federal hambriento de dinero, asegura Beatriz Pagés
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